PRIMEROS PASOS

Después de mucho meditarlo, me he decidido a crear este blog para, a través de este medio, poder plasmar mis impresiones sobre algunos aspectos o hacer comentarios de quellas cosas que nos rodean. Aquello que atrae nuestra atención y nos hace pensar.

Os contaré... Un abrazo

4 de julio de 2010

PARA EL RECUERDO...






Ahora que recorro las calles de La Coruña,donde tengo la suerte de poder pasar el verano,siento cierta pena al ver las tiendas antiguas que van cerrando. En pocos días, me he encontrado con varios carteles de "SE ALQUILA", "LIQUIDACION POR JUBILACION", "LIQUIDACION POR CIERRE DE NEGOCIO"... La tasquita "ODILO", situada en la calle de la Torre, también se ha despedido para siempre .Era un lugar de encuentro, donde los clientes se trababan como de familia. Dicen que los vecinos de la calle están tristorros y que ya nada será lo mismo. Se echarán de menos sus tacitas de vinillo y sus tapitas, como la tortilla, que tuve ocasión de probar en alguna ocasión y estaba muy requetebuena. Después de,según creo, más de 50 años, es lógico que se note su falta.


También ha desaparecido el famoso "BAR OTERO" que destacaba por sus calamares y casi siempre estaba lleno. En su lugar, hay un bar gallego-asturiano.


Asimismo, la emblemática zapatería "ASTORIA" da el cierre por jubilación, después de 62 años "luciendo" en la calle Real. Por ella pasaron hace años Melani Griffith y Massiel, así como otras "vedettes" y estrellas del espectáculo.

¡¡Lástima que se vaya perdiendo la tradición!!. Nunca será como antes. Menos mal que nos queda "LA BOMBILLA"....




2 comentarios:

  1. Cuantos calamares he tomado yo en Otero, el antiguo,por que el de ahora ya no era tan bueno pero...., en fin , todo va cambiando. Como la canción " Unos que vienen y otros que se van...". Odilo tenía el mejor vino del rivero servido en taza y unas tapas cojonudas. Los de antes, los que tenían bares, tascas, casas de comidas, se preocupaban de darnos bién de comer, ahora, prácticamente les da igual,con excepciones , solo se preocupan de ganar dinero. Creo , sin ninguna duda, que los tiempos de ahora son mucho más egoístas que los de antes.

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  2. Es una pena ver como van desapareciendo los lugares que creaban el alma de las ciudades, síntoma de que el tiempo pasa por todos.
    Eso si, espero que a la bombilla le queden unos añitos más para seguir saboreando sus pinchos...

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