Había una vez una tortuguita que, sin saber el motivo, un día desapareció. Entonces, sus dueños empezaron a buscarla por aquí, por allá... Por mucho que lo intentaron, nunca la encontraron. Transcurrieron diez años y,un buen día, una maceta grande de las muchas que tenían, se rompió y, al caer la tierra, apareció la tortuguita viva y tan tranquila, como si nada hubiese pasado.
Me encantaria que, de esa manera tan inesperada, volviesen a mi lado las cosas perdidas y todavía añoradas.