Ha fallecido Marcelino Camacho. Tenía 92 años y toda su vida se dedicó a defender los derechos de los trabajadores. Yo creo que este hombre era bueno y, sobre todo, muy legal. Su lucha le costó pasar varios años en cárceles y campos de concentración. Su paciente esposa se dedicaba a tejerle sus famosos jerseys para que, al menos, estuviese abrigadito en prisión. A mí me gustan las personas que defienden a los humildes, a los trabajadores...Los que se ponen siempre a su lado aunque ello les cueste cárceles y penas. Pues eso, yo te mando un gran aplauso. Quizás tu empeño haya servido de algo.